El Gobierno Nacional implementó en las últimas horas una medida festejada por muchos poseedores de automóviles: la inclusión de las autopartes dentro del régimen de "pequeños envíos" para compras online. Esta decisión permite la importación privada de repuestos sin la necesidad del Certificado de Homologación de Autopartes de Seguridad (CHAS), lo que facilita el acceso a piezas vehiculares y reduce los costos para los consumidores.
Sin embargo, es importante hacer una aclaración, especialmente para los habitantes de provincias como Mendoza. El cambio de reglamentación es para las importaciones vía courier, no para el régimen de equipaje. Por lo tanto, no se podrá cruzar a Los Andes o Santiago para comprar los repuestos.
Más acceso a autopartes y menos trabas burocráticas
Con esta medida, elementos fundamentales como neumáticos, frenos, lámparas y amortiguadores podrán ser importados sin la certificación CHAS, agilizando la disponibilidad de repuestos. La normativa se enmarca dentro del régimen de "pequeños envíos", que ya incluía productos como tecnología, juguetes y prendas de vestir. Ahora, los usuarios podrán adquirir autopartes del exterior con menos restricciones y a precios más competitivos, especialmente para repuestos que no están disponibles con facilidad en el mercado argentino.
image.png
Al habilitar la importación de autopartes en forma directa se podría terminar con los autos importados durmiendo en talleres.
Requisitos y límites para la importación de autopartes
A pesar de la flexibilización, existen ciertos límites que los compradores importadores deben cumplir:
La mercadería debe ser para uso personal y no comercial.
Se permiten hasta cinco envíos por año por persona.
Cada envío no puede superar los 50 kilos de peso ni los U$S 3.000.
Si el valor FOB (free on board) del envío es menor a U$S 400, estará exento del derecho de importación y de la tasa estadística.
Se debe abonar el IVA e impuestos internos si correspondiera.
Para realizar compras bajo este régimen, los usuarios pueden utilizar distintos métodos de pago, como tarjetas de crédito, PayPal, DineroMail y Western Union. Además, es obligatorio contar con CUIT y clave fiscal nivel 3 en ARCA.
El cambio de reglamentación es para las importaciones vía courier, no para el régimen de equipaje. Por lo tanto, no se podrá cruzar a Los Andes o Santiago para comprar los repuestos.
Impacto en el mercado local de repuestos
El ex legislador provincial y especialista en derecho del consumidor, Mario Vadillo, asegura que: “Durante años, los dueños de automotores en Argentina han sufrido la falta de repuestos o el sobreprecio absurdo impuesto por concesionarias y fabricantes. Cuando un consumidor necesitaba una pieza, la respuesta era siempre 'No lo tenemos' o le daban un precio totalmente fuera de mercado para maximizar ganancias, aprovechando que eran las únicas que podían importar esos repuestos”.
Esta situación llevó a una realidad reiterada que todos conocemos: vehículos inmovilizados en talleres por meses o tener que recurrir al mercado negro, asociado indefectiblemente al delito, para obtener las piezas necesarias.
La posibilidad de importar libremente repuestos a precios internacionales podría debilitar el negocio de concesionarias y distribuidores locales, que por años se beneficiaron de una posición dominante. Además, esta medida podría aportar a las políticas de seguridad, impactando en la estructura delictiva vinculada al robo de autopartes, ya que la disponibilidad de repuestos legales podría reducir la demanda en el mercado negro.
El beneficio para los automovilistas tiene otra cara. La eliminación del CHAS para los pequeños envíos de autopartes tiene un impacto aún no evaluado en la industria nacional de autopartes. Mientras los consumidores celebran la posibilidad de comprar repuestos sin intermediarios, fabricantes, distribuidores y trabajadores encienden luces de alarma sobre las nuevas facilidades para la importación directa.
La afectación directa de las importaciones de consumidores finales ha crecido significativamente. Sin embargo, aún no está mensurada con certeza la afectación a la industria local, especialmente en rubros que ya vienen liberados desde los comienzos del mandato de Javier Milei.
Aunque no hay números oficiales, ya hay respuestas a esta nueva tendencia. Por ejemplo, Aeropuertos Argentina 2000 anunció hace algunos días la ampliación de la terminal courier en el aeropuerto de Ezeiza, con una inversión de 6 millones de dólares.