Semanas atrás, cuando el INDEC compartió los datos de la inflación de octubre, en Mendoza se produjo un fenómeno por demás llamativo para la situación económica que enfrenta el país. En el desglose por rubros, la categoría “Alimentos y Bebidas no alcohólicas” marcó deflación, en parte, gracias a la marcada baja del valor de las verduras, tubérculos y legumbres. Desde la Unión Frutihortícola Argentina (U.FH.A.) compartieron un comunicado que va de la mano con dicha información y aseguraron que el sector atraviesa “una situación excepcional”.
Desde la entidad anunciaron que el valor de la mayoría de las verduras experimenta una “baja significativa” e, incluso, que muchos de estos productos se venden por debajo de sus costos de producción. “Esto podría desencadenar un rebote en los precios en varios mercados, aunque por ahora es favorable para los consumidores”, señalaron.
Sin embargo, pese a las buenas noticias, el dato respecto de la compra no es tan alentador. Según el comunicado firmado por el titular de la organización, Omar Carrasco, el poder adquisitivo de los consumidores sigue estando limitado por el valor de los salarios, los cuales “no alcanzan” para cubrir el costo de vida o satisfacer sus necesidades básicas. En tanto, añadieron que “la relación entre oferta y demanda es determinante en este escenario”.
Precios sorprendentemente bajos en el sector frutihortícola: cuánto cuesta la bolsa de verduras
A lo largo del año, los argentinos debieron modificar sus hábitos de consumo debido a los incesantes aumentos de precios en alimentos. Ahora, las cifras relevadas por la U.FH.A. indican que es un buen momento para volver a incorporar frutas y verduras en nuestro día a día.
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Pese a precios "excepcionalmente bajos" en frutas y verduras, el consumo no repunta
La entidad resaltó, principalmente, la variación en el valor del zapallito italiano, que tuvo una impactante caída. “En invierno alcanzaba precios de $70.000 a $80.000 por cajón, y ahora se vende entre $4.000 y $5.000 ”, puntualizaron. Además, precisaron que esto se replicó con la berenjena, el tomate, el choclo, el pimiento, la papa y la cebolla.
“Una bolsa de cebolla cuesta entre $4.000 y $5.000, mientras que una de papas está entre $6.500 y $9.000”, añadieron.
El mensaje de la Unión Frutihortícola a productores y consumidores
Por último, en el comunicado la U.FH.A. subrayó que es “esencial que los proveedores transmitan estas fluctuaciones a los consumidores para que estos puedan adaptarse a la oferta y la demanda”. Especialmente en el contexto económico actual, donde los argentinos atraviesan las mayores dificultades al momento de afrontar el pago de bienes y servicios básicos.
“La situación actual exige medidas para proteger tanto a los productores, que están enfrentando pérdidas, como a los consumidores, que también lidian con sus propias limitaciones económicas”, concluyen.
