Gran Hermano tuvo este domingo una nueva gala de eliminación por el voto positivo, con la particularidad de que fueron dos los participantes que tuvieron que dejar la casa.
El conductor Santiago del Moro confirmó que una de las eliminadas no se subió al auto que iba a trasladarla hacia el estudio de TV.
Gran Hermano tuvo este domingo una nueva gala de eliminación por el voto positivo, con la particularidad de que fueron dos los participantes que tuvieron que dejar la casa.
Una de ellas fue Delfina: la joven que había sido la primera eliminada de la edición, regresó como reemplazo de Claudio, pero no duro mucho en la casa.
Como ocurre tras cada salida del reality, el conductor Santiago del Moro los recibe en el piso de Telefe, donde lo espera junto al público que asiste a la gala. Fue el caso de Saif, el otro eliminado de la noche, que se bajó del Cabify y saludó al conductor.
Sin embargo, y tal como había ocurrido en su primera eliminación, la joven, otra vez, no pudo ingresar al estudio de TV.
"No quiso subir al Cabify por un ataque de ansiedad", contó el animador de Telefe.