La fiscalía de robos y hurtos ordenó la imputación de la empleada doméstica detenida por el robo millonario en una casa de Palmares de Godoy Cruz y luego la acusada quedó libre, beneficiada al no poseer antecedentes penales.
La justicia imputó a la empleada doméstica que supuestamente fue víctima del robo en el barrio Palmares de Godoy Cruz.
La fiscalía de robos y hurtos ordenó la imputación de la empleada doméstica detenida por el robo millonario en una casa de Palmares de Godoy Cruz y luego la acusada quedó libre, beneficiada al no poseer antecedentes penales.
Así lo decidió el fiscal Oscar Malla, quien acusó a María Fernanda Tula (40) como partícipe primaria de un robo agravado por escalamiento.
Es decir que para los detectives Tula participó y fue cómplice del robo de 10.000 dólares que perpetraron al menos tres delincuentes en una casa del exclusivo barrio privado Palmares, en Godoy Cruz.
El robo ocurrió el pasado jueves al mediodía, cuando supuestamente tres delincuentes atacaron a la empleada doméstica de una casa del barrio Palmares de Godoy Cruz y le robaron una caja fuerte con 10.000 dólares.
Tras las primeras horas de investigación, la justicia puso la lupa en la presunta víctima, quien incurrió en algunas contradicciones a la hora de detallar el accionar de los sospechosos, si tenían armas de fuego y cómo habían irrumpido en la casa.
En horas de la noche de ese día, la fiscalía ordenó su detención. Durante el fin de semana, los detectives decidieron imputar a la mujer como partícipe del robo y ahora la pesquisa está centrada en los autores materiales del atraco.
No obstante, por el momento no hay rastros de esos sospechosos. Además, se investiga si tuvieron ayuda de alguna otra persona vinculada al barrio, debido a que pudieron ingresar y escapar tranquilamente.
En este contexto, los detectives esperan por los informes de los peritos que trabajaron en la escena del robo. Con esa información, se podría identificar a algunos de los sospechosos.